De las más de 64 especies de serpientes y culebras que habitan en el territorio quintanarroense, solo seis de ellas son consideradas como venenosas, reveló su más reciente estudio del biólogo Arturo Bayona Miramontes.
El también catedrático del Instituto Tecnológico Superior y director de la casa de la naturaleza en Felipe Carrillo Puerto, expuso que en Quintana Roo únicamente hay registro de seis especies de serpientes venenosas que son la Nauyaca real (bothrops asper), Nauyaca yucantánica (porthidium yucatanicum), Nauyaca naricilla (porthidium nasutum), Coralillo (lampropeltis triangulum) y Serpiente de cascabel (crotalus tzabcan). Aseguró que el resto de las especies, entre las más comunes como la Boa constrictor, falsa coral, entre otras, no son venenosas. Sin embargo, al no ser de conocimiento de la población, existe una falsa creencia que todas son de las mismas características y riesgos.
Ante ello, destacó las diferencias y denominaciones de las cuales pueden ser de peligro como la serpiente, pues es aquel reptil que tiene glándulas venenosas y colmillos huecos, lo que les permite inocular el veneno en el torrente sanguíneo, mientras que una culebra no cuenta con estas características, es decir, no todos estos ofidios pueden ser peligrosos.
“Lamentablemente, los niños y jóvenes han crecido con ideas erróneas, donde piensan que todos estos reptiles son venenosos, pero con base a mis conocimientos puedo mencionar que mucho del veneno está en la mente de las personas más que en las serpientes”.
Sostuvo que solo los expertos pueden saber si una serpiente es o no venenosa por lo que sugiere no tener ningún tipo de contacto directo con estos reptiles ni mucho menos matarlas, ya que tienen una gran importancia en el equilibrio de los ecosistemas, por lo que acabar con ellas puede generar un impacto en la naturaleza, son controladoras de posibles plagas.
“Es necesario que se le dé la importancia al cuidado de las especies, científicamente estos seres vivos tienen una gran función en el ecosistema, aunque no nos demos cuenta y acabar con estas y otras especies podrían poner en riesgo la vida del ser humano, he sabido de personas de la zona maya quienes inmediatamente exterminan a estos animales”.
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